Reflexión personal:

    Tras entrevistar a Nieves, una docente innovadora, he podido extraer varias conclusiones interesantes.

     Por un lado, me ha quedado claro que la innovación consiste sobre todo en la observación y el análisis de nuestros grupos de estudiantes para conocer sus necesidades y  para detectar los posibles puntos de mejora, siempre enfocándonos a una mejora de los resultados de aprendizaje. Además, un aspecto fundamental de la misma será la puesta en común de los resultados obtenidos con el resto de la comunidad educativa, para compartir con otros el conocimiento que nuestra innovación haya generado. Esto será lo que nos permita crear, colaborando entre todos, un sistema que proporcione una educación integral y de calidad.

     Por otra parte, las innovaciones pueden incidir sobre diferentes áreas de la educación, y afectarán de forma diferente al sistema educativo en función de si son promovidas por la Administración y la dirección de los centros, o por los propios docentes. En cualquiera de los casos, me parece importante subrayar la idea de que el docente será la figura primordial para la innovación (concepto que ya vinimos trabajando en el primer tema). De nuevo he comprobado cómo el profesor, por ser quien está en contacto directo con el alumnado, es el encargado de implementar las innovaciones dentro del aula, de organizarlas y controlarlas, y de extraer las conclusiones oportunas acerca de los resultados.

     No obstante, tal como ya se exponía en la documentación que se nos proporcionó para preparar la entrevista, las innovaciones suelen generar resistencias que dificultan su aplicación. Por eso, para la generación de innovaciones no solo será importante la autocrítica y la voluntad de cambio de un profesor en cuestión, sino también el grado de colaboración que encuentre por parte de la dirección y los otros profesores, los alumnos o las familias. Tal como Nieves nos contaba, cuando el ambiente es favorable todos los procesos innovadores se facilitan sobremanera, mientras que si no lo es puede llegar a resultar muy difícil modificar el esquema establecido.

     Para acabar, creo que también es digno de mención el hecho de que, aunque pueda parecer complicado modificar los fallos presentes en nuestro sistema educativo actual por el gran número de resistencias, hay muchos docentes que están trabajando duramente para conseguirlo. Creo que así lo prueba la entrevista a María Acaso, y su idea de hacer una revolución de toda la concepción que tenemos de la educación. Personalmente, tal como indiqué en la entrevista a Nieves, me pareció asombrosa la idea de que tengamos una “educación bulímica”. Así, me han resultado realmente interesantes las propuestas de evaluación que tanto María como Nieves nos hacen, ya sea evaluando con el “pago al trabajo realizado” o teniendo en cuenta las capacidades aplicadas (como el análisis de la información o el discernimiento de la información veraz de aquella que no lo es) más que la retención de datos.